- Ofrece una experiencia completa: historia nacional, vestigios prehispánicos, tradiciones vivas
- Uno de los corredores de aguas termales más importantes se encuentra en esta región
- Por Alejandra Pérez Bernal/Enviada
Clase Turista
ABASOLO, Guanajuato.- Abasolo se localiza al suroeste del estado de Guanajuato y es uno de esos destinos que sorprenden cuando se le dedica tiempo. Desde la Ciudad de México, el recorrido por carretera es de aproximadamente cuatro horas, lo que lo convierte en una opción accesible para una escapada de fin de semana o como parte de una ruta más amplia por el Bajío.
Lejos de las multitudes, Abasolo ofrece una experiencia completa: historia nacional, vestigios prehispánicos, tradiciones vivas, gastronomía local y uno de los corredores de aguas termales más importantes de la región.
La mejor forma de comenzar a conocer Abasolo es caminando por su Centro Histórico. La plaza principal marca el pulso del municipio y conduce naturalmente a uno de sus espacios más emblemáticos: la Parroquia de Nuestra Señora de la Luz. Este templo de estilo neoclásico, cuya construcción inició en 1857 y se inauguró en 1896, no solo destaca por su arquitectura sobria y elegante, sino por su relevancia histórica: aquí fue bautizado Don Miguel Hidalgo y Costilla, el Padre de la Patria.
A pocos pasos se encuentra el Museo Miguel Hidalgo, inaugurado en 2015. Es una visita obligada para entender la importancia de Abasolo en la historia de México. El museo resguarda la réplica certificada de la pila bautismal donde fue bautizado Hidalgo, además de fotografías históricas, documentos y piezas arqueológicas provenientes de la región. El acceso es gratuito y el recorrido es claro, bien documentado y accesible para todo tipo de viajeros.
Peralta: el pasado prehispánico del Bajío
Para quienes buscan ir más atrás en el tiempo, la Zona Arqueológica de Peralta es uno de los grandes atractivos de Abasolo y del estado de Guanajuato. Habitada entre los años 300 y 900 d.C., Peralta fue uno de los seis asentamientos más importantes de la tradición Bajío y un relevante centro cívico del centro-norte de Mesoamérica.
El sitio impresiona por la escala de sus plazas, patios hundidos y estructuras monumentales, que revelan el alto nivel de organización de las civilizaciones que habitaron esta región. El Museo de Sitio complementa la visita con cerámica, herramientas y objetos encontrados durante las excavaciones arqueológicas.
Además de su valor histórico, Peralta es un espacio donde la cultura sigue viva. La alfarería y la cocina tradicional son dos expresiones que forman parte del patrimonio local y que hoy se integran a experiencias de turismo comunitario, donde el visitante puede conocer técnicas artesanales y sabores que se han transmitido por generaciones.
Aguas termales: el lado relajado de Abasolo
Abasolo también es sinónimo de descanso. El municipio cuenta con manantiales de aguas termales que han dado origen a varios balnearios, ideales para disfrutar en familia o para una pausa de bienestar.
El más conocido es el Parque Acuático La Caldera, un complejo que combina albercas de aguas termales con instalaciones modernas, toboganes, áreas verdes y servicios completos. Además, cuenta con hotel, lo que facilita hospedarse en el mismo sitio y aprovechar al máximo la experiencia. La Caldera es una de esas paradas que equilibran diversión y relajación, y que se agradecen después de un día de recorridos culturales.
Un destino que se conecta con otros
Una de las grandes ventajas de Abasolo es su ubicación estratégica. Visitar este municipio permite integrarlo fácilmente a un recorrido por otros destinos del suroeste guanajuatense como Cuerámaro, Huanímaro y Pénjamo, localidades cercanas que enriquecen la experiencia con tradiciones, paisajes rurales, historia y gastronomía propia. Esta cercanía convierte a Abasolo en un excelente punto de partida dentro de una ruta regional que invita a conocer el Bajío desde una mirada más local y auténtica.
Una recomendación clara para quienes quieren explorar esta zona de Guanajuato desde otra perspectiva.
Uriel Rodríguez, coordinador de Museos, Elena Canto Crivelli, encargada de Turismo y Jimmy Zavala, auxiliar de Turismo
Foto de portada:https://www.facebook.com/abasolocomunica
