- Menos del 2% de los CEOs en banca son mujeres
Clase Turista
El 17 de octubre de 1953 marcó un antes y un después en la historia de México: ese día se publicaron las reformas a los artículos 34 y 35 de la Constitución que reconocen a las mujeres como ciudadanas con plenos derechos civiles y políticos. Más de siete décadas después, aunque la presencia femenina ha avanzado en la política, con un Congreso cercano al 50% de representación, en sectores estratégicos como el financiero la desigualdad persiste: casi la mitad de los empleos en banca son ocupados por mujeres, pero sólo una de cada cuatro llega a puestos directivos y menos del 2% alcanza la posición de CEO.
Frente a este panorama, el webinar Liderazgo con propósito: Mujeres que transforman la industria financiera, organizado por Provenir, reunió a voces influyentes del sector para reflexionar sobre los retos que enfrentan las mujeres en la industria financiera, cómo ha evolucionado el entorno y qué pueden hacer las líderes actuales para abrir camino a las nuevas generaciones.
De la lucha histórica a los retos actuales
Aunque el reconocimiento del voto femenino en 1953 fue un hito en la inclusión de las mujeres en la vida pública, la batalla por la equidad se ha extendido a lo largo de décadas. Entre los logros más recientes destacan la incorporación del principio de paridad de género en 2014 y la creación de leyes para prevenir y sancionar la violencia política contra las mujeres en 2020. No obstante, como coincidieron las ponentes, el acceso a posiciones de poder en negocios y banca sigue siendo un terreno donde aún se libran batallas importantes.
De la exigencia individual a la responsabilidad colectiva
Durante el encuentro, moderado por Gabriela Herrera, directora de estrategia de crecimiento en Provenir, participaron Graciela Guadalupe Corrales, vicepresidenta senior de riesgo de negocio en Citi; Elsa Rueda, directora adjunta de riesgos en Nissan; Marcela Morandeira Santamaría, directora de administración integral de riesgos en Gentera; e Ivonne Judith Espinoza Ramírez, subdirectora de Decision Systems & Credit Bureau Management en HSBC México.
Las panelistas coincidieron en que el cambio comienza con una decisión personal: levantar la mano. “Si esperas a sentirte perfecta para hacerlo, nunca vas a dar el paso”, afirmó Morandeira. Pero también subrayaron que las organizaciones tienen la responsabilidad de crear condiciones más equitativas: esquemas flexibles de trabajo, liderazgos empáticos y estructuras que reconozcan distintas realidades de vida, incluyendo la maternidad.
“La flexibilidad laboral que ofrecen muchas corporaciones ha sido clave para que más mujeres continúen sus carreras”, añadió Corrales, recordando que en su caso fue posible gracias a una red de apoyo en casa.
Un nuevo estilo de liderazgo para nuevos tiempos
Las ponentes destacaron que el liderazgo que requiere la industria hoy no es el autoritario, sino el que escucha, genera confianza y desarrolla personas. “Nuestro trabajo como líderes es desarrollar personas, no crear dependencias”, afirmó Espinoza. Rueda agregó: “Tener una visión clara es importante, pero también lo es saber cómo orquestar los talentos del equipo”.
Construir el camino para más mujeres
Entre las recomendaciones clave para las nuevas generaciones estuvieron:
Asumir la responsabilidad de su carrera: buscar oportunidades, prepararse y confiar en sus capacidades.
Crear redes de apoyo: hacer networking y abrir espacios de conversación con otras mujeres líderes.
Conectar lo personal con lo profesional: cuando los objetivos del negocio se alinean con los personales, “la magia sucede”.
Finalmente, Herrera destacó el compromiso de Provenir con la transformación de la industria:
“El cambio comienza cuando nos atrevemos a ocupar el lugar que queremos. Estos espacios son clave para inspirar a las nuevas generaciones y demostrar que es posible romper paradigmas desde dentro”.

