- Las aguas se mueven
- Por Carlos Ramos Padilla
Clase Turista
Las tormentas políticas se están generando en los Estados Unidos. Un atentado contra Trump, COVID a Biden, Vance crecido, Kamala emergente a la presidencia que podría parecer ser la puntera en la fila para el salón oval.
Su designación representaría un momento histórico para el partido de demócrata al elegir a la primera mujer, no es del todo segura.
Joe Biden, anunció que se retira de su competencia por la reelección con Donald Trump, en una determinación que promete turbulencias hacia la carrera por la Casa Blanca de 2024. “Si bien ha sido mi intención buscar la reelección, creo que lo mejor para mi partido y el país es que renuncie y me concentre únicamente en cumplir con mis deberes como presidente durante el resto de mi mandato” escribo Biden.
En tanto Trump retornó la expresión desafiante y manifestó en parte importante de su discurso a referirse a México y dijo que no se debe renegociar el T-MEC, porque es óptimo.
Insistió en que habrá una deportación masiva y afirmó que su amigouuu AMLO “ya no es presidente» de México y que Marcelo Ebrard «tiene un IQ de 50″. El descrédito hacia Ebrard por parte de Trump es permanente y lo ridiculiza desde, como según se sabe, lo humilló y lo hizo “doblarse” ante el problema migratorio a tan punto que, señala, Ebrard le pido no informar sobre su debilidad.
Ahora el próximo secretario de economía escribió “Cuando te insultan en campaña ,como acaba de hacerlo el ex Presidente Trump ,siempre hay un propósito electoral: ganar adeptos. Nunca aceptaré calificación de un candidato en el exterior. No me intimida. Defenderé los intereses de México con toda dignidad y firmeza».
Y extrañamente intervino Sheinbaum en un primer raspón con el demócrata: “ Lamento el lenguaje soez del expresidente Trump y desde luego discrepo de su opinión sobre Marcelo Ebrard. Para mí es uno de los mejores servidores públicos de México y será un gran secretario de economía de nuestro país, que nadie debe olvidar, es libre y soberano”.
Para quienes festinaban la llegada de Marcelo porque estaría al frente de la negociación del Tratado binacional de Comercio podrían enfrentar la posibilidad de que Trump lo rechace o lo vuelva a “doblar”. Con todo lo que se diga la imagen de Ebrard en el extranjero es denigrante y México ha salido muy lastimado con la absurda defensa a tipos como Maduro, Evo Morales, Daniel Ortega, Díaz Canel, con la imposición de embajadores sin experiencia y con sospechas de corrupción, el escándalo con Ecuador, el conflicto con el Vaticano, la disimulada defensa a Putin entre otros asuntos.
En pocas palabras la politiquería, maquillaje y manipulación de la imagen de ciertos personajes mexicanos por parte del gobierno no es similar al balance y calificación en el extranjero. Sheinbaum debe corregir porque incluso con Trump se habla y en serio de asuntos de seguridad nacional que involucran a varios miembros activos del gobierno con aquello del fentanilo y los narcos.
Así que Sheinbaum se ha metido bajo una lluvia de flechas que cree las va a evadir. Trump ya desconoció a AMLO y ha descalificó a Ebrard y Vance, dicen los que lo conocen, es aún más estricto.
Sheinbaum debe entender que tratar con Estados Unidos no es similar a codearse con Cuba. Y aquí es donde nuevamente Sheinbaum se ve obligada a deslindarse de AMLO porque el tabasqueño con sus ocurrencias no le sirven de tablita salvadora.
