- Consejos para prevenirla
Clase Turista
La menopausia marca un hito importante en la vida de las mujeres, caracterizado por el cese definitivo de la menstruación y la capacidad para procrear. Sin embargo, este proceso natural se debe a una serie de cambios hormonales que, si no se atienden adecuadamente, pueden derivar en graves consecuencias para la salud ósea.
De acuerdo con datos del Censo del 2020, en el país hay más de 6.2 millones de mujeres entre 45 y 55 años, rango de edad en el que comúnmente se presenta la menopausia. Esta realidad demográfica y social pone de manifiesto la importancia de abordar la menopausia desde una perspectiva integral, no sólo como un proceso biológico natural, sino como un fenómeno con repercusiones en la salud, el bienestar y la vida social de las mujeres mexicanas, sin embargo, sí hay consecuencias físicas que podemos prevenir, como la osteoporosis.
“Los estrógenos, hormonas sexuales femeninas producidas principalmente por los ovarios, juegan un papel crucial en el mantenimiento de la densidad y fortaleza ósea. Durante la menopausia, los niveles de estrógenos experimentan un descenso abrupto, lo que desencadena un desequilibrio en el proceso de remodelación ósea”, comenta el Dr. Carlos Suárez Ahedo, ortopedista especialista en cirugía de cadera y de rodilla.
“Normalmente, nuestro organismo se encuentra en un constante proceso de renovación ósea, donde se elimina el hueso viejo y se genera hueso nuevo. Sin embargo, la caída en los niveles de estrógenos tras la menopausia altera este proceso, inclinando la balanza hacia la “destrucción” ósea a un ritmo acelerado”, agregó.
Como resultado de esta pérdida acelerada de hueso, las mujeres postmenopáusicas se encuentran en un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, una enfermedad caracterizada por huesos frágiles y un mayor riesgo de fracturas. Se estima que una de cada tres mujeres experimentará una fractura osteoporótica a lo largo de su vida.
Entonces, ¿cuándo debemos acudir al médico?
Si bien la osteoporosis puede ser asintomática en sus primeras etapas, es fundamental estar atentas a ciertas señales que podrían indicar la presencia de la enfermedad. Entre ellas, el Dr. Suárez Ahedo destaca:
- Pérdida de altura: Disminución gradual de la estatura, especialmente en la espalda.
- Dolor de espalda: Dolor persistente o recurrente en la zona baja de la espalda.
- Postura encorvada: Inclinación progresiva de la espalda hacia adelante.
- Fracturas óseas: Fracturas que ocurren con facilidad, incluso tras caídas leves.
Ante la presencia de cualquiera de estos signos, es crucial acudir al médico para un diagnóstico oportuno. Una densitometría ósea, una prueba indolora que mide la densidad mineral ósea, puede ayudar a determinar el riesgo de osteoporosis.
