- En el Mercado de Futuros de Chicago ya se observa un cambio de posiciones
- Por Ricardo Jiménez
Clase Turista
En el Mercado de Futuros de Chicago (CME) comienza a observarse un cambio de posiciones de pesos a dólares, esto quiere decir que los inversionistas extranjeros le están apostando ahora a la divisa americana al registrar un aumento en la demanda tras la expectativa de una mayor depreciación del peso mexicano en las próximas semanas.
El tipo de cambio peso-dólar bajo ese escenario alcanzó una cotización máxima de 18.4663 pesos por dólar, aunque hacia el cierre de las operaciones del viernes pasado registró un nivel de 18.24 pesos por billete verde, este comportamiento del peso mexicano es de llamar la atención, pues de persistir los movimientos alcistas existe una alta probabilidad de que rompa el precio de resistencia de los 18.50 pesos.
Es importante mencionar que en este año la paridad peso-dólar tocó un nivel mínimo de 16.6262 pesos alcanzado el 28 de julio y hasta el cierre de las operaciones de la semana pasada de 18.24 pesos, la moneda mexicana registra una pérdida de valor de 9.69%, equivalente a una depreciación de 1.61 pesos.
Los participantes empiezan a percibir un cambio de tendencia definitivo del peso mexicano, es decir, existen amplias posibilidades de que la paridad cambiaria siga depreciándose frente al dólar estadounidense, además, de percibirse que en el corto plazo podrían mostrar cotizaciones cercanas a los 19 pesos por dólar.
En el mercado interno se vislumbra un ambiente de nerviosismo, sobre todo por la aprobación de la iniciativa de la Ley de Ingresos en la Cámara de Diputados, que forma parte de Paquete Económico 2024, donde se contempla un déficit presupuestario del 4.9% del PIB, algo no visto desde 1988, y lo máximo permitido es del 2% para no generar presiones inflacionarias.
El ánimo de los inversionistas extranjeros se ha visto mermado por el aumento en la aversión al riesgo a nivel global, pues al mercado de cambios comienza a afectar el conflicto de Israel, al cierre del fin de semana se intensificó en la Franja de Gaza y el Líbano.
El conflicto se podría extender a otros países como Irán y Arabia Saudita, se teme que pueda afectar la producción y comercio de petróleo. En la semana pasada, el precio del crudo finalizó con un avance de 1.21%, cotizando en 88.75 dólares por barril, tocando un máximo de 90.78 dólares por barril.
Además, otro de los factores que está contribuyendo a la depreciación de la moneda local, es la expectativa de que la Reserva Federal (Fed) mantenga una postura monetaria restrictiva por un periodo de tiempo prolongado.
En comentarios realizados por varios oficiales de la Fed, diciendo que prefieren mantener la tasa sin cambios el próximo 1 de noviembre e inclusive han dicho que la postura monetaria restrictiva se podría extender hasta el próximo año, actualmente la tasa de interés de referencia del fed se encuentra en 5.25%.
Los ciclos anteriores que la Reserva Federal ha adoptado una postura monetaria restrictiva, es posible que decidan mantener la tasa de interés sin cambios hasta el segundo semestre del 2024, en lugar de realizar aumentos adicionales. Esto implicaría que la tasa se mantendría sin cambios durante un periodo de al menos 11 meses.
En la próxima semana, los participantes del mercado estarán atentos a la evolución del conflicto entre Israel y Hamás, la decisión de política monetaria del Banco Central Europeo y la publicación del Producto Interno Bruto al tercer trimestre del 2023 de los Estados Unidos.
En la agenda económica estadounidense se espera la publicación de los indicadores PMI, balanza comercial, venta de casas nuevas y el sentimiento de los consumidores de la Universidad de Michigan, por su parte, en la Eurozona también anunciarán el sentimiento de los consumidores y el PMI, mientras en la parte local se publicarán datos como la inflación de la primera quincena de octubre, el IGAE, tasa de desempleo y la balanza comercial al mes de septiembre.
