- SALTANDO FRONTERAS
- Por CARLOS RAMOS PADILLA
Clase Turista
He referido en otras colaboraciones que desde la administración de AMLO y la actual se ha registrado una de las peores etapas diplomáticas de nuestro país.
Bajo la operación de Marcelo Ebrard hasta la triste figura de Juan Ramón de la Fuente las pifias, errores y desatinos han sido monumentales y estamos a punto de observar como por intereses políticos se enviará a Alejandro Gertz Manero a una embajada de un “país amigo” creciendo cada vez más la lista inexpertos e improvisados como Isabel Arvide, Omar Fayad, Alejandro Murat, Quirino, Genaro Lozano y otros que han metido a México en malentendidos y grotescos espectáculos.
Hoy por injerencias abiertas México ha dejado en pausa la relación con España y ha roto vínculos con Perú y Ecuador.
Ha ofrecido asilo a personajes como Evo Morales y a Pedro Castillo. Le permiten el discurso principal al cubano Díaz-Canel en la ceremonia cívica más importante como la Independencia Nacional. De hecho fue muy mal calificado en el marco internacional que la presidenta (con a) solo expresara un reiterado “sin comentarios” a Corina Machado por obtener el Premio Nobel de La Paz.
Hemos llegado al ridículo de ver a un funcionario de la SRE comerse los cacahuates en la Casa Blanco y en la misma mansión a la esposa de AMLO, Beatriz Gutiérrez, tomándose “selfies”. Pero ahora el Congreso estadounidense ya revisa los envíos de petróleo mexicano a Cuba por razones “humanitarias”.
El Subcomité para el Hemisferio Occidental del Comité de Relaciones Exteriores del Congreso convocó a la audiencia “Las relaciones de México con la región”.
Entrarán a revisión los energéticos a Cuba y el respaldo a Nicolás Maduro. Esto último pone en graves circunstancias a México y más aún cuando Sheinbaum declara que medirá las consecuencias de que Trump determine al fentanilo como “arma de destrucción masiva” porque esto amplía la posibilidad de una intervención estratégica de Estados Unidos en la región incluyendo a México.
Queda la anticipada percepción de que la disposición de México va en contra de las acciones de la Casa Blanca.
Se siente como un enfrentamiento subterráneo que no ha sido ni siquiera debilitado por Esteban Moctezuma en Washington, otro improvisado más que llegó cuando se decidió remover a una extraordinaria embajadora como Martha Bárcena.
En temas de trascendía como seguridad, comercio y política internacional no hay empatía con los dos vecinos norteños: Canadá y Estados Unidos.
Y las cosas se pueden aún calentar más por la renuencia mexicana de entregar a la justicia a aquellos que con evidencias en investigaciones han manejado la política de mano del crimen organizado. El franco mensaje de la cancelación de visas es un referente importante y el que con insistencia se mencione a los hijos de AMLO (principalmente a Andy que está bajo la estrategia de bajo perfil) y a funcionarios en activo de Morena en cargos públicos. La congresista María Salazar publicó una nota más que puntual: “México es nuestro vecino más cercano, y ninguno de los dos va a ninguna parte.
Hoy, durante la audiencia del Subcomité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes sobre el hemisferio occidental, envié un mensaje claro a la presidenta Claudia Sheinbaum: la historia está mirando. Dejen de permitir a los dictadores en Venezuela y Cuba. Nuestro hemisferio necesita liderazgo, no silencio.
México es demasiado importante para quedarse al margen. Debe defender a los Estados Unidos en defensa de la LIBERTAD y del hemisferio occidental”. Mientras tanto, Sheinbaum pidió autorización al Senado para que puedan ingresar elementos de Navy Seal’s y del 7mo. Grupo de Fuerzas Especiales de la Marina de los Estados Unidos. Se pretende que los agentes participe en el evento “Mejorar la Capacidad de las Fuerzas de Operaciones Especiales”. En caso de que sea autorizado estarán en diferentes localidades: en el Cuartel General de la Unidad de Operaciones Especiales en Donato Guerra, Estado de México, en el Centro de Capacitación Especializado de Infantería de Marina (CENCAEIM) en Champotón, Campeche y en el Mando Naval de Ciudad del Carmen, Campeche.
