- Un viaje por la gastronomía y los rincones históricos de Yucatán que despierta todos los sentidos
- Por Alejandra Pérez Bernal/Enviada
Clase Turista
VALLADOLID, Yucatán.- Valladolid no es solo un destino, este Pueblo Mágico de Yucatán es un viaje que se siente con todos los sentidos. Sus calles empedradas, flanqueadas por fachadas en tonos pastel, huelen a leña, flor de naranja y achiote, y cada plaza, cada iglesia y cada esquina parecen invitar a detenerse, respirar y descubrir.
Comienza tu recorrido por el centro histórico, donde la Plaza Principal Francisco Cantón Rosado late con vida propia. Frente a ella se alza la Iglesia de San Servacio, con su imponente fachada amarilla y su campanario que parece marcar el ritmo del pueblo. Bajo la sombra de los laureles, los visitantes se mezclan con locales mientras el aroma de pan recién horneado y flores flota en el aire.
Además, aquí puedes disfrutar de marquesitas rellena con queso Edam (queso de bola) rallado y combinada con ingredientes como mermelada, cajeta, chocolate o crema de avellanas. O quien lo prefiera puede disfrutar de nieves artesanales y uno que otro antojito. Sabores que hacen de la plaza un festín para el paladar y un lugar perfecto para sentarse a observar la vida cotidiana de Valladolid
A unos pasos, el Monasterio de San Bernardino de Siena te espera con sus claustros y muros que guardan siglos de historia, desde la fundación de Valladolid en 1543 hasta la Guerra de Castas y los primeros ecos de la Revolución Mexicana en 1910.
Dónde comer
La ciudad se disfruta también con el paladar. Restaurante Hostería del Marqués ofrece clásicos yucatecos como lomitos de Valladolid, cochinita pibil y queso relleno en un ambiente colonial que hace que cada bocado sea memorable. Para algo más auténtico y popular, el Mercado Municipal despliega sabores caseros y recetas transmitidas de generación en generación. Y para una experiencia gourmet de lujo, Mestizo en Oriundo Luxury Nature Villas fusiona tradición y creatividad en platos que son obras de arte.
Cómo disfrutar la noche
Cuando cae la noche, Valladolid se transforma. Don Diablo Rooftop permite disfrutar cocteles con vista a la plaza, mientras la ciudad se ilumina y la vida late con otro ritmo. Para quienes buscan algo secreto y exclusivo, El Almacén, el speakeasy del Hotel Mesón del Marqués, ofrece cocteles de autor y un ambiente que invita a quedarse mucho más tiempo de lo planeado.
Qué visitar y hacer
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Cenote Saamal en Hacienda Selva Maya: un refugio de agua cristalina donde nadar y relajarse rodeado de naturaleza.
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Calzada de los Frailes: un paseo peatonal imperdible lleno de boutiques, galerías, cafés y talleres artesanales.
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Ek Balam y otros sitios arqueológicos cercanos: pirámides mayas y esculturas que transportan a otra época.
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Explorar los barrios antiguos de Valladolid, descubrir rincones escondidos y caminar sin prisa mientras la ciudad revela su historia y encanto.
Dónde hospedarse
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Hotel Mesón del Marqués: céntrico, romántico y con el encanto de una casona colonial del siglo XVII.
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Oriundo Luxury Nature Villas: un refugio de lujo rodeado de selva, ideal para quienes buscan exclusividad y experiencias memorables.
Valladolid se saborea, se respira y se vive. Desde el aroma de su comida hasta el brillo de sus cenotes, cada experiencia queda grabada en la memoria, haciendo de este Pueblo Mágico un destino que no se olvida.
