- ¿Sabías que la meditación profunda puede ayudarte a ver mejor?
Clase Turista
Más allá de sus beneficios conocidos en la mente y las emociones, la meditación también tiene un impacto directo sobre la salud visual. Así lo afirma la Dra. Ainhoa de Federico, profesora universitaria, autora bestseller y creadora del método Volver a Ver Claro, especializado en visión natural.
“La relajación es una de las bases de una buena visión. Y la meditación profunda puede convertirse en una herramienta poderosa para mejorar la salud de los ojos y el bienestar general”, explica.
¿Cómo influye la meditación en los ojos?
Cuando meditamos, la mente se aquieta, el sistema nervioso se regula y el cuerpo entra en un estado de reparación. Esto permite liberar tensiones acumuladas, incluidas las que afectan a los músculos oculares, favorece el parpadeo natural, el lagrimeo y reduce la inflamación asociada al uso excesivo de pantallas o lentes.
Además, en estados meditativos profundos, muchas personas toman conciencia de emociones retenidas, lo cual puede contribuir a desbloqueos tanto físicos como energéticos.
Estudios científicos: meditación y glaucoma
Un estudio publicado en Journal of Glaucoma (2018) mostró que la práctica diaria de meditación reduce la presión intraocular en pacientes con glaucoma, además de disminuir los niveles de cortisol (la hormona del estrés). Esto convierte a la meditación en una herramienta complementaria eficaz junto a tratamientos médicos como gotas, cirugía o láser.
¿Por qué funciona? Porque el estrés psicológico es un factor agravante del glaucoma, y técnicas de relajación profunda ayudan a contrarrestarlo.
El método “Volver a Ver Claro”: meditar para ver mejor
Dentro del método Volver a Ver Claro, Ainhoa de Federico integra meditaciones guiadas especialmente diseñadas para apoyar la salud visual. Estas prácticas combinan:
- Visualizaciones activas
- Conciencia respiratoria
- Relajación ocular profunda
- Movimientos suaves de los ojos
- Técnicas como el palming (palmeo)
“Las meditaciones que guían la atención hacia los ojos ayudan a liberar tensiones, mejorar la lubricación natural y activar mecanismos de autorregulación en el sistema visual”, explica Ainhoa.
Estas sesiones son accesibles, pueden realizarse en casa y están pensadas para toda la familia.
Meditar ayuda… en mucho más que la vista
La ciencia ha demostrado que la meditación:
- Reduce el estrés, la ansiedad y la depresión
- Mejora el sueño y la inmunidad
- Incrementa la creatividad, la concentración y la memoria
- Ayuda en procesos de adicción y manejo del dolor
Todo esto impacta indirectamente también en la salud visual, ya que la visión no es solo física: es también neurológica y emocional.
Importante: meditación como complemento, no como sustituto
La meditación no debe reemplazar el diagnóstico ni tratamiento médico en caso de enfermedades visuales. Siempre es importante consultar con un médico. Pero sí puede ser una aliada poderosa, tanto para prevenir como para acompañar procesos de recuperación.
“Cuando la mente se calma, el cuerpo se regula y la vista mejora. La claridad interior se refleja también en la forma de ver el mundo”, concluye Ainhoa de Federico.

