- También es contrario a los acuerdos internacionales: BBVA Research
Clase Turista
La Cámara de Representantes de Estados Unidos propuso un impuesto del 5% sobre las remesas enviadas por migrantes indocumentados a cualquier destino global.
Un análisis de BBVA Research señala que dicho impuesto sería injusto, regresivo y contrario a los acuerdos internacionales, pero tendría efectos limitados y no afectaría significativamente la balanza de pagos.
En 2024, México recibió 62.5 mil millones de dólares en remesas desde Estados Unidos, enviadas por 8 millones de personas nacidas en México con estatus legal (ciudadanos o residentes), además de millones de mexicanos de segunda generación.
El universo potencialmente afectado por un impuesto serían los aproximadamente 4 millones de mexicanos indocumentados que residen en Estados Unidos.
Con el impuesto, el costo de enviar $350 desde Estados Unidos a México aumentaría de $6.00 a $23.50 (casi cuatro veces el costo actual). Esta importante distorsión de precios obligaría a los migrantes indocumentados a buscar alternativas para enviar dinero.
Se han identificado tres alternativas que podrían utilizarse para evitar el impuesto: 1) buscar apoyo de familiares o amigos con ciudadanía o residencia estadounidense; 2) optar por el acceso bancario para recibir remesas mediante transferencias interbancarias; y 3) utilizar canales informales de remesas.
Si el impuesto promueve el uso de canales informales para el envío de remesas, y estos se fortalecen, podría incentivar la participación de organizaciones criminales en estas actividades.
En una estimación inicial, los flujos de remesas que podrían verse más afectados por este impuesto serían, en un escenario extremo, los de Tamaulipas (-4.4%), Guerrero (-4.3%), Puebla (-3.6%), Oaxaca (-3.6%) y Veracruz (-3.4%).
Las autoridades mexicanas y las instituciones financieras deben responder a este desafío incrementando el nivel de inclusión financiera, lo que contribuiría a la agenda de digitalización de la actual administración.
