- Su postulación causa controversia por su su estrecha relación con el diputado federal Ernesto Prieto Gallardo, quien enfrenta múltiples acusaciones
Clase Turista
La postulación de Francisco Enrique Valdovinos Elizalde como magistrado ha generado controversia por su estrecha relación con el diputado federal Ernesto Prieto Gallardo, quien enfrenta múltiples acusaciones, entre ellas presunto incumplimiento en el pago de pensión alimenticia y abuso sexual. Esta cercanía plantea dudas sobre la idoneidad de su candidatura y la posible instrumentalización del poder judicial para fines personales.
Un Padrinazgo Cuestionable
Valdovinos Elizalde ha fungido como Magistrado Instructor en el Tribunal Federal de Justicia Administrativa, según la edición de enero de 2025 de la revista Visión Contable. Sin embargo, su relación con Prieto Gallardo compromete la percepción de independencia y compromiso con la justicia.
Las Acusaciones Contra Prieto Gallardo
Ernesto Prieto Gallardo ha sido denunciado por el uso indebido de programas sociales cuando fue diputado local en el Congreso de Guanajuato. También enfrenta señalamientos por no cumplir con el pago de pensión alimenticia a su hija no reconocida. De acuerdo con el testimonio de su expareja y madre de la menor, intentó obligarla a abortar. La activista Diana Luz Vázquez ha exigido que reconozca a su hija y pague la pensión provisional, lamentando su negativa a ejercer la paternidad.
El nombramiento de Prieto Gallardo como representante de Morena ante el Instituto Nacional Electoral (INE) desató inconformidad entre consejeras electorales, quienes se negaron a participar en su toma de protesta como forma de protesta ante la acusación de adeudo alimenticio.
Mientras Prieto evade sus obligaciones como padre, ha sido visto en eventos sociales acompañado por mujeres trans. No es la primera vez. El año pasado fue señalado por una escorttrans por no haberle pagado tras los servicios prestados.
Implicaciones para el Poder Judicial
La eventual designación de Valdovinos Elizalde como magistrado, apadrinada por un diputado con antecedentes cuestionables, pondría en riesgo la confianza en la imparcialidad y autonomía del sistema judicial. Es indispensable que las instituciones encargadas de evaluar candidaturas actúen con rigor y transparencia, garantizando que los nombramientos respondan al mérito y no a intereses políticos.
La sociedad civil y la comunidad jurídica deben mantenerse vigilantes, exigir rendición de cuentas y evitar que el poder judicial se convierta en una herramienta al servicio de intereses personales.
El final no está escrito… aún
Francisco Enrique Valdovinos Elizalde aspira a ocupar una de las sillas más relevantes del sistema judicial. Antes de que lo logre, la sociedad debe preguntarse quién lo impulsa, a quién responde y qué intereses representa.
Si se permite que perfiles ligados a escándalos políticos y personales impartan justicia, mañana no habrá derecho a reclamar cuando esa justicia pierda rostro, nombre y ley. Solo tendrá un precio.
Diputado Ernesto Prieto