- En el cuarto trimestre de 2024, la construcción representó el 1.7% del PIB nacional, según INEGI
- México ocupa el sexto lugar mundial por superficie certificada LEED en 2024, con 2.2 millones de m²
Clase Turista
En un entorno económico desafiante, donde la eficiencia operativa y la inversión inteligente son prioridades para las empresas, la construcción sustentable en México se posiciona como una estrategia con alto potencial de rentabilidad y generación de valor inmobiliario.
Con una aportación del 1.7% al PIB nacional durante el cuarto trimestre de 2024, de acuerdo con el INEGI, este sector no solo representa un motor clave de la economía, sino también un terreno fértil para impulsar prácticas más competitivas, resilientes y alineadas con la demanda creciente de sustentabilidad por parte de inversionistas y consumidores.
En este escenario, adoptar criterios de sustentabilidad abre la puerta a mejorar la eficiencia energética en construcción, optimizar recursos y generar entornos urbanos más resilientes e inclusivos. Aunque el sector es responsable de una proporción significativa de las emisiones globales de CO₂, en los últimos años México ha comenzado a destacar por sus avances. Prueba de ello es que en 2024 el US Green Building Council (USGBC) posicionó al país en el sexto lugar mundial por superficie certificada LEED, con 2,2 millones de metros cuadrados, liderando en América Latina.
“La construcción sustentable es una decisión estratégica que influye en el valor de los inmuebles, en la competitividad de las empresas y en la calidad de vida de las personas”, afirma Patricia Araiza, Directiva de GAYA. “México tiene todo para consolidarse como referente regional si adopta tecnologías limpias y modelos colaborativos desde las etapas más tempranas de los proyectos”, agrega.
Construcción sustentable: Ventaja competitiva y motor de inversión
De acuerdo con la especialista de GAYA, consultora especializada en proyectos de construcción, para que el sector evolucione hacia un modelo más sustentable y rentable, es fundamental alinear sus procesos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, enfocándose en cinco áreas estratégicas:
• ODS 7: Energía no contaminante: Fomenta el diseño inteligente de edificios para garantizar fuentes de energía seguras, baratas y limpias.
• ODS 9: Industria, innovación e infraestructura: Promueve la innovación en técnicas y materiales de construcción para reducir la huella ambiental y mejorar la eficiencia.
• ODS 11: Ciudades y comunidades: Invita al desarrollo de modelos urbanos más sostenibles e inclusivos.
• ODS 12: Responsables de producción y consumo: Adoptar modelos que reciclan y recuperan materiales de construcción, reduciendo el desperdicio y el impacto ambiental.
• ODS 13: Acción por el clima: Fomentar edificaciones que fortalezcan la resiliencia urbana ante desastres y contribuyan a mitigar el cambio climático.
Diversas ciudades mexicanas como CDMX, Monterrey, Guadalajara y Mérida lideran en proyectos sustentables, alineándose con las tendencias globales de urbanismo verde. En paralelo, sectores como el corporativo han comenzado a migrar hacia oficinas certificadas LEED, mientras que en el ámbito residencial se integran soluciones como paneles solares, sistemas de recolección de agua y materiales ecológicos. También la infraestructura pública, hotelera y digital —como los centros de datos— está adoptando estándares de eficiencia energética y regeneración ambiental.
Innovación que genera retorno: Prácticas claves para una construcción más verde y rentable
A pesar de los avances hacia una construcción sustentable en México, aún existen prácticas que deben incorporarse de forma generalizada para consolidar una transformación profunda. Algunas de las más relevantes incluyen:
• Materiales reciclados y ecológicos: Como acero recuperado, bambú, bioconcreto y vidrio reciclado.
• Diseño pasivo: Aprovechar la orientación del edificio, luz solar y ventilación natural.
• Iluminación LED: Con su eficiencia disminuye el consumo energético.
• Automatización hídrica y energética: Implementación de IA, sensores y sistemas automáticos que optimizan el uso de energía y agua.
• Sistemas de energía limpia: Paneles solares y uso de energía eólica.
• Ventanas de cristal doble: Que generan un aislamiento térmico, manteniendo la temperatura interna estable y reduciendo el uso de calefacción o aire acondicionado.
• Diseño bioclimático: Respeto por la biodiversidad, cultura y tradiciones para un desarrollo más armónico con las localidades.
• Construcción reversible: Uso de materiales que permiten desmontar y reutilizar las estructuras, promoviendo la sustentabilidad a largo plazo.
• Tecnología avanzada: Uso de IA, robótica, impresión 3D y herramientas como BIM y PROCORE para una planificación y ejecución más eficiente.
• Financiamientos: Las empresas acceden a nuevos modelos de financiamiento, como los ofrecidos por Artik Kapital , para facilitar la transición hacia la construcción sustentable.
Sustentabilidad como estrategia de negocio: Certificaciones, confianza y posicionamiento
“El camino hacia la construcción sustentable en México requiere una estrategia prometedora que involucre a los operadores y administradores desde el inicio de los proyectos de construcción. Esto garantiza una sinergia multidisciplinaria que minimiza problemas, maximiza resultados redituables y cuida con transparencias, honestidad y ética la inversión realizada en proyectos verdes inteligentes y únicos ”, Patricia Araiza.
En este contexto, las certificaciones sustentables han sido clave para profesionalizar el sector y facilitar la adopción de prácticas responsables. Programas como LEED, EDGE, ISO 14001, BREEAM y Passivhaus no solo mejoran el rendimiento energético y el uso de recursos, sino que elevan el valor de las propiedades y las vuelven más atractivas para inversionistas nacionales e internacionales.
“Las empresas que se adaptan mediante metodologías innovadoras, trabajo en equipo multidisciplinario, tecnologías avanzadas y colaboraciones estratégicas que mantienen un comisionamiento adecuado, no solo liderarán el mercado, sino que también serán clave en la creación de un futuro más verde y próspero”, concluyó Araiza.