- Las bajas temperaturas hacen que los vasos sanguíneos se constriñan, lo que disminuye el flujo de sangre
Clase Turista
Las bajas temperaturas pueden intensificar el dolor articular en muchas personas. Si bien es cierto que el frío no causa directamente la artritis u otras enfermedades articulares, sí puede exacerbar los síntomas existentes y dificultar la movilidad.
Aunque no existen estadísticas específicas sobre el impacto del frío en el dolor articular en México, se sabe que un alto porcentaje de la población mexicana sufre de alguna forma de dolor crónico, incluyendo el dolor articular. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), un gran número de mexicanos reportan limitaciones en sus actividades diarias debido a problemas de salud, entre los que se incluyen las enfermedades reumáticas.
¿Por qué el frío afecta a las articulaciones?
El frío puede provocar una serie de cambios en el cuerpo que influyen en la salud articular, el Dr. Carlos Suárez Ahedo, ortopedista especialista en cirugía de cadera y de rodilla, nos comenta por qué es esto.
Reducción del flujo sanguíneo: Las bajas temperaturas hacen que los vasos sanguíneos se constriñan, lo que disminuye el flujo de sangre a las articulaciones. “Esto puede limitar el suministro de nutrientes y oxígeno necesarios para reparar los tejidos dañados y puede aumentar la rigidez”, menciona el Dr. Suárez Ahedo.
Aumento de la viscosidad del líquido sinovial: El líquido sinovial lubrica las articulaciones y amortigua los movimientos. El frío puede aumentar su viscosidad, lo que dificulta el movimiento y puede causar dolor.
Mayor sensibilidad a los cambios de presión: Las personas con enfermedades articulares suelen ser más sensibles a los cambios de presión barométrica. Los frentes fríos pueden provocar cambios en la presión atmosférica, lo que puede desencadenar dolor articular.
Por ello, el Dr. Carlos Suárez Ahedo, nos da algunos consejos para cuidar tus articulaciones en invierno
- Mantén tus articulaciones calientes:
- Utiliza ropa abrigadora y guantes para proteger tus manos y pies del frío.
- Aplica compresas calientes en las articulaciones doloridas.
- Toma baños calientes o duchas.
- Realiza ejercicio regularmente:
○ El ejercicio ayuda a mantener las articulaciones flexibles y fuertes.
○ Opta por actividades de bajo impacto como la natación, el tai chi o el yoga.
○ Consulta a tu médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios nuevo.
- Mantén un peso saludable:
○ El sobrepeso pone mayor presión sobre las articulaciones, especialmente las rodillas y las caderas.
○ Una dieta equilibrada y ejercicio regular pueden ayudarte a alcanzar un peso saludable.
- Descansa lo suficiente: El sueño adecuado es esencial para la reparación de los tejidos y la reducción del dolor.
- Sigue un tratamiento adecuado:
○ Si tienes alguna enfermedad articular, sigue las recomendaciones de tu médico.
○ No te automediques.
Por último, el Dr. Suárez Ahedo menciona que “la prevención es la clave”, y nos da algunos consejos para ello.
- Calentamiento antes de realizar cualquier actividad física: Esto ayudará a preparar tus músculos y articulaciones para el movimiento.
- Evita los movimientos bruscos o repetitivos: Estos pueden agravar el dolor articular.
- Utiliza ayudas para levantar objetos pesados: Esto reducirá la presión sobre tus articulaciones.
- Mantén una buena postura: Una buena postura ayuda a distribuir el peso de manera uniforme y reduce la tensión en las articulaciones.
“El frío puede agravar el dolor articular en muchas personas, pero existen medidas que puedes tomar para proteger tus articulaciones y mejorar tu calidad de vida. Si experimentas dolor articular persistente, es importante que consultes a un médico para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados”, concluyó el Dr. Carlos Suárez Ahedo.
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