- Aproximadamente 80% del agua utilizada para la producción de papel vuelve a su fuente original, luego de reutilización y tratamiento.
Clase Turista
La producción de papel utiliza grandes cantidades de agua, sin embargo, aproximadamente 80% vuelve a su fuente original después de ser reutilizada y tratada; mientras que 19.7% regresa a la atmósfera por evaporación y únicamente 0.3% del agua capturada permanece en el producto, de acuerdo con el documento Huella Hídrica del Papel, publicado por Two Sides.
Ecolab, líder mundial en sustentabilidad que ofrece soluciones y servicios de agua, en conmemoración del Día Mundial del Papel (1 de noviembre), destaca el desarrollo de la tecnología utilizada en el sector papelero y reconoce la necesidad de seguir avanzando para que las cifras de consumo de recursos sean aun menores y ello represente beneficios sustentables, operativos y económicos.
“Usualmente se percibe a la industria papelera como una de las mayores consumidoras de agua, sin embargo, también es uno de los sectores que más recicla, más reutiliza y más devuelve a la naturaleza”, señaló Ray Vigil, Director de la división de Papel para Ecolab para Latinoamérica Norte. “Los índices de eficiencia han aumentado dramáticamente en las últimas décadas, por ejemplo, hace poco más de 60 años se utilizaban aproximadamente 120m3 de agua por tonelada de papel; mientras que en la actualidad, la misma cantidad de papel requiere únicamente 5m3. Número que puede reducirse aún más con la tecnología adecuada”, añadió.
El agua es esencial para la fabricación del papel porque permite refinar, mezclar y transportar las fibras de celulosa, polisacárido natural que se encuentra en las paredes de las células vegetales que es la base de la pulpa del papel; por ello es sumamente importante que los métodos y sistemas con los que se llevan a cabo esos procesos sean lo más eficientes posible y con ello disminuya el consumo de recursos, no sólo agua, sino también energía, horas-hombre y además se reduzcan las emisiones de residuos sin comprometer la calidad del producto.
Un ejemplo en el que las características deben ser óptimas, es la producción de cartón para cajas y embalajes, debido a que sus usos implican altos niveles de resistencia. Actualmente, existen soluciones que ofrecen entre 2 y 3 veces más rendimiento de resistencia en comparación con tecnologías con mayor tiempo. Esta innovación brinda a los productores ventajas competitivas para cumplir sus objetivos de sustentabilidad y mejorar la rentabilidad.
La producción de cajas de cartón registró un incremento de hasta 200% debido al auge del e-commerce derivado de la pandemia de Covid-19 en 2021, según cifras de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra). A nivel global, se estima que el mercado de cajas de cartón corrugado crezca 4.92% anual hasta 2029 y pase de 195.4 millones de toneladas métricas en 2024 y llegue a 248.47 millones de toneladas métricas en cinco años, de acuerdo con datos de Mordor Intelligence.
Es a través de avances basados en ciencia que se puede mantener el tiempo de actividad de la maquinaria, reducir las roturas y desperfecos del papel y aumentar la eficiencia en los equipos. Entre los beneficios que se reflejan en las cajas y embalajes se encuentran: menor gasto en aditivos, menor peso en el producto final y mayor efectividad en el transporte.
Sobre los beneficios rentables y en sustentabilidad, una empresa líder dedicada a la produción de cartón corrugado logró incrementar anualmente su productividad en 12,000 toneladas de papel, un valor total agregado de $3,100,000 dólares; reducir 1.5 millones de kWh de energía y evitar la emisión de 976 toneladas métricas de CO2.
Es así que a través de la resistencia mejorada fue posible una reducción en el refinado del papel, un impacto significativo en el proceso de deshidratación y disminución de la demanda de vapor en los secadores, lo que permitió aumentar la velocidad de las máquinas papeleras e incrementar la superficie de cartón producida por tonelada de papel.
“Es una creencia común que la producción de papel en general utiliza grandes cantidades de agua, pero hay que tener en cuenta que la huella hídrica de una fábrica de papel disminuye considerablemente gracias a la reducción, reciclaje, reutilización y reintegración del líquido al ciclo natural”, finalizó Ray Vigil.
