- La fabricante de vehículos eléctricos se apega al Capítulo 11
- Acusa a su partner de fraude y fracaso de los acuerdos y tratos
Clase Turista
El fabricante estadounidense de camionetas eléctricas Lordstown Motors, con sede en Ohio, se declaró en bancarrota y demandó por fraude al gigante electrónico taiwanés Foxconn, por 170 millones de dólares, tras responsabilizarlo por ello del fracaso de loa acuerdos.
En un comunicado, la firma de EU demandó a Foxconn por «fraude» y por «incumplimiento deliberado y constante de compromisos comerciales y financieros».
Las acciones de Foxconn «han causado un daño material a la empresa, así como a sus perspectivas», destacó Lordstown, que justificó en ello la solicitud de protección por bancarrota del Capítulo 11 efectuada a las autoridades comerciales estadounidenses.
Foxconn, el principal proveedor de la estadounidense Apple, es clave en el ensamblaje de los iPhone y otros productos de las principales marcas internacionales.
Sin embargo, buscó la diversificación y el grupo volvió su mirada al sector de vehículos eléctricos, a los que pretende transformar en pilar de su desarrollo.
De ese modo, en mayo del año pasado, Foxconn compró a Lordstown su planta para el ensamblaje de vehículos en Ohio, y con el acuerdo, Lordstown había «aceptado ceder sus activos más valiosos a Foxconn», argumentó el fabricante de automóviles fundado en 2018, «a cambio de la garantía de que Foxconn apoyaría el desarrollo de sus camionetas Endurance».
Sin embargo, esto no prosperó porque el grupo taiwanés «no tenía intención de cumplir con sus compromisos…», indicó la compañía estadounidense.
Foxconn rechazó las acusaciones en comunicado señalando que «ha mantenido una actitud positiva» en las negociaciones con Lordstown para ayudarle en sus dificultades financieras y que pretende seguir procurando «una solución satisfactoria» para las partes.
Hay que recordar que, durante la pandemia, muchos fabricantes de vehículos eléctricos no tuvieron mucha suerte y se quedaron en el arranque. Otras, como es el caso de Lordstown Motors se quedaron a un paso de lograr el éxito.
Desde 2021, Lordstown Motors había presentado números desfavorables en sus informes financieros, y eso le llevó a tomar la difícil decisión de reducir a la mitad la producción de la Endurance, su primera camioneta eléctrica, proyecto que ahora se complicó con la declaración de quiebra.
